Inici ALTRES NOTICIES Si te dieran a elegir entre una manzana podrida y un frasco...

Si te dieran a elegir entre una manzana podrida y un frasco de veneno…

1307

SI TE DIERAN A ELEGIR ENTRE UNA MANZANA PODRIDA Y UN FRASCO DE VENENO…

Imagina un día cotidiano de tu vida: te levantas, desayunas una rica tostada con un buen café cargado, ¿o posiblemente seas de los que prefieren una opción fría?, más en estos días de calor, como, por ejemplo, un bol de yogur con plátano y granola. Vale, solo he dado dos opciones de entre el gran abanico existente de alimentos que nos sirven para romper el ayuno, piensa, en ese caso, en tu desayuno favorito o en el top 1 de la lista de opciones existentes.

Sigamos con nuestro día, ya estamos preparados para hacer nuestra sesión de deporte o listos para encarar nuestra jornada laboral. El reloj marca las 11:05, nuestras tripas hablan, nuestros intestinos nos están llamando porque necesitan de nuevo un poco de “gasolina”, para poder tener la máxima concentración y un rendimiento óptimo. Nos sacamos un par de galletas caseras (de chocolate y avena) y nos acercamos a la máquina de café, en este caso, elegimos la opción té con canela. Tan sumergidos estamos en nuestro trabajo que, sin darnos cuenta, llegamos a medio día con toda nuestra atención enfocada en lo que estamos haciendo, que, a su vez, tanto disfrutamos. Fin de la primera parte de la jornada, ordenamos archivos y recogemos la sala. Llegamos a casa, hora de comer… pensad, pensad en ese alimento favorito que hace que todos tus sentidos se enfoquen en disfrutar de su aroma, sabor, textura… y por fin, la hora del postre. ¿Manzana podrida o veneno? Si tuvieses que elegir entre ambas opciones, ¿cuál elegirías?

Posiblemente seas de los que elijan la opción 1 (manzana podrida), posiblemente seas de los que opten por la opción 2 (veneno), o probablemente pienses que no te quedarías con ninguna de las dos opciones. Si tus pensamientos se van a esta última respuesta registrada (“no me quedo ni con una manzana podrida ni con el veneno”), te invito a que reflexiones un poquito en por qué rechazas un alimento que lógicamente, ante su ingesta, tu sistema digestivo o tu microbiota se van a ver dañados, pero en cambio, muchas veces, aceptas pensamientos que posiblemente (a nivel emocional y mental) son igual de tóxicos que los alimentos mencionados anteriormente. Te invito a que reflexiones en el porqué de estos pensamientos, o mejor, plantéate… ¿los pensamientos negativos o tóxicos, pensamientos limitantes… son útiles?

En tu mano está elegir una manzana podrida, un frasco de veneno, un pensamiento tóxico o destructivo o ninguna de todas las opciones descritas, porque como dueño que eres de tu vida, tú decides escoger solamente aquello que te haga bien, qué te dé energía, que valga la pena, que sume, y que, a ser posible, nunca reste.

Firma: Raquel García Bayarri