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(Autoayuda) Nuevos caminos, nuevos horizontes: primera pisada del comienzo del sendero

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Nuevos caminos, nuevos horizontes: primera pisada del comienzo del sendero

Parada, frente al espejo, reconoce: vacío interno; vínculos emocionales rotos, necesidad de recomponer el puzle. Con las piezas necesarias. Su puzle, su historia, su vida.

Su vida, la que dedica en gran medida a los demás. Apasionada de poder dar, sin necesidad de recibir nada a cambio. El poder ayudar de modo voluntario hace de Alejandra una persona transparente, con gran exquisitez en lo sencillo, en el buen gusto… Sabe trasmitir como lo puede hacer un músico con una composición; un cocinero con un plato; un escritor con un relato…

Parada frente al espejo, reconoce, le encanta darse a los demás, pero… ¿y ella?; ¿Qué queda de esa mujer fuerte, valiente, que sabe conectar con los demás y trasmitir su fuerza y su vitalidad? Realmente, toda esa vitalidad y energía que ha enfocado tantísimas veces en el exterior… ¿residen en ella o, de tanto entregarse a los demás, sus fuerzas se han agotado como la batería de un móvil última generación? Puesto el ejemplo, si el móvil precisa de un cargador adecuado para poder conectarlo y dotarlo de energía eléctrica… Alejandra debe coger el cargador que conecte su vida a la energía vital necesaria para poder vivir a su manera, sin ataduras, sin apegos tóxicos. Necesita andar su camino, dar la primera pisada para el comienzo de ese sendero que, si bien anduvo en algún momento, por ir acompañada, posiblemente no se fijó en la magnitud y el poder de cada paso, y en la importancia de la huella que queda enmarcada en el sendero tras empezar su andadura.

Debo decir que, el camino a veces no es fácil, más si la cima se encuentra a kilómetros de altitud. Si bien nuestras metas son grandiosas, el camino tendrá altibajos. Del mismo modo, la vida de Alejandra pasará por momentos altos y por momentos bajos. Ante los momentos altos, todo el disfrute. Ante los momentos bajos, toda la compasión. Porque de nada sirve subir un sendero escarpado y al mismo tiempo ir dándose latigazos a uno mismo. El sufrimiento es parte del proceso, pero el sufrimiento nunca debe ser autoimpuesto, porque la vida, con sus más y con sus menos, ya nos sirve en boca infinidad de situaciones agridulces. Por ello… ¿qué necesidad de servirse en frasco de oro veneno del más puro efecto devastador?

Empieza el día, parada frente al espejo, encara el día con la sensación dulce que deja en boca el almíbar y lo ácido de un limón recién exprimido.

Raquel García Bayarri

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El Sol naciente. Un nuevo amanecer (autoayuda)